Pese a que 'El Hormiguero' es un programa familiar, cuyo cometido último es entretener, el martes por la noche su presentador, Pablo Motos, traspasó la línea y comentó el plan de desescalada propuesto por el Gobierno, que pocas horas antes había presentado el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en rueda de prensa desde el Palacio de La Moncloa.
"Mascarilla obligatoria, no recomendable ni muy recomendable. El orgullo de Pedro Sánchez le impide decir que han vuelto a meter la pata y que las mascarillas han de ser obligatorias", afirmó Motos ante la sorpresa de muchos espectadores, que no dudaron en comentar el momento en las redes sociales convirtiéndolo en tendencia.
"Habrá un momento en el que se caerán del guindo y será obligatoria. Su orgullo le impide decir que es obligatoria, que la cagaron y que la mascarilla evidentemente la tiene que llevar todo el mundo", insistió, incendiando así un debate que lleva semanas copando medios e informativos.
"No hay que olvidar es que el coronavirus sigue por ahí. No hay vacunas ni medicamentos. Dijeron que España era el octavo país del mundo que más test se han hecho, según la OCD. Pero es que esos datos se los dieron ellos a la OCD. Si contamos como cuenta el Gobierno somos los octavos, pero si contamos como contamos los demás, estamos en la decimosexta posición", prosiguió el presentador, que no es la primera ni se espera que la última vez que carga contra el Gobierno.
De hecho, en otra ocasión aprovechó su espacio para dedicarle unas palabras a los mayores: "Os entiendo. Sentís que ser mayor es como ser de tercera porque no os tienen en cuenta. Encima, si te contagias, sientes que será el final. Pero eso ha cambiado. La verdad, aunque suene muy dura, esta situación nos ha puesto a todos cara a cara con la muerte. No te abandones ahora. Tus hijos no se lo van a perdonar en la vida y tus nietos no tienen por qué quedarse sin ti".
Y, para terminar con el tema, habló de un familiar suyo: "Esto me pasó con mi madre. Vi como se estaba dejando llevar. Me dijo que para qué seguir luchando. Yo le contesté que porque yo le necesitaba para vivir. Le di una razón para luchar y aguantó un año más. Al lunes siguiente, me pidió un camisón blanco nuevo porque quería verse bien. Además, cuando puedas salir a la calle te van a tratar como un superhéroe. No nos falléis, nos hacéis falta".