Tetuán (Marruecos)

Mezcla de culturas, tradición y portadora de paz, esta región situada en el norte del continente africano, representa siglos de historia reflejados en su Medina. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la Medina de Tetuán es una joya compuesta por callejuelas que concluyen en hermosas plazas, rincones y puertas que harán que el visitante quiera descubrir algo nuevo en cada paso que dé.

Lo más bello de la Medina es ver como los zocos que la conforman están perfectamente delimitados. Cada gremio, cada artesano o vendedor, tiene su terreno dentro de la grandeza de esta. Comenzaremos con un paseo por el mercado El Fouki seguido por el zoco El Houts o El Gherza y así tomaremos un primer contacto con Tetuán que empapará nuestro viaje de nuevas experiencias. Dependiendo del lugar por donde paseemos podremos ver tejidos o bordados, oler especias marroquíes o saborear el pan y las pastas recién hechas o contemplar, en definitiva, el trabajo de los artesanos y disfrutar del arte por ejemplo, de la alfarería.

Pero hay un lugar en la Medina que nos recordará la importante influencia que la cultura andalusí ha tenido en esta ciudad. El Mellah, es uno de los barrios judíos más importantes del país y sus grandes ventanas y el hierro forjado de sus balcones evoca la arquitectura española y más concretamente la andaluza.

En nuestra visita a la Medina y una vez conocido su mercado, pasearemos también por la Alcazaba situada en la parte más alta y que se encuentra dominando la ciudad de Tetuán. Pero no solo la Medina conforma esta bella ciudad aunque sí es gran parte de ella.

Tetuán y todo el terrero que la rodean, han guardado recelosamente cada tesoro que la historia ha puesto allí. La Plaza de Hassan II es un buen ejemplo de ello. Encargada de unir la zona de la Medina y la zona moderna, acoge el Palacio del Califa que actualmente es el Palacio Real o también conocido como Dar el Makhzen. Continuando el camino por las callejuelas hacia la parte moderna y dejando a nuestras espaldas la Medina, encontraremos la Plaza de Mulay el Mehdi, corazón de la parte nueva.

Así, caminado entre casa blancas, llegaremos hasta la plaza El Jala, uno de los lugares más emblemáticos de esta zona y donde los turistas disfrutarán de la magia marroquí adaptada a los nuevos tiempos.

Tetuán es un lugar donde se une la tradición y la historia musulmana con la andalusí. La riqueza cultural que se extiende por sus calles blancas y sus edificios históricos nos trasportarán a un remanso de paz que hará que la cultura musulmana quede instala en nosotros.

¡Buen viaje, viajeros!