Así ha afectado el Covid-19 a uno de los destinos españoles estrella de todos los veranos

Solo en Benidorm el coronavirus ha dejado un 85% menos de pernoctaciones en el mes de julio comparadas con las cifras del año pasado, tal y como refleja el balance de la agrupación empresarial hotelera Hosbec. Durante la mejor semana de todo el verano, se produjo una caída a la mitad, lo que pone en contexto cómo ha podido ir la temporada en el resto de la península.

Si tenemos en cuenta el conjunto de la Comunidad Valenciana, el turismo ha caído un 70% respecto del mismo periodo del pasado año. Ya durante el primer mes tras el estado de alarma se registró un descenso del 60% de media en los ingresos por habitación disponible. Ni que decir tiene que el mercado laboral vinculado a la hotelería también ha sufrido una reducción del 50% en el número de trabajadores.

Según datos de Europa Press, la región tuvo 455.102 visitantes, un 56,3% menos y 929 establecimientos abiertos, una bajada del 1,3%. La ocupación media se situó en un 38,9%, con una caída del 38,9% mientras que la estancia fue de dos días y medio, uno menos. En total, hubo 1.129.971 pernoctaciones hoteleras, un 69% menos, y 99.681 plazas, un 30,5% menos. El número de personas empleadas fue de 10.115, la mitad que un año antes.

Para hacernos una idea, Benidorm recibió 61.187 viajeros, un 75,4% menos y un descenso del 85% en las pernoctaciones, que se quedaron en 192.061. Por otro lado, solo han podido abrir la mitad de sus establecimientos -un total de 69-, lo que representa un descenso del 51%, y hubo 2.003 ocupados, un 69% menos. La cifra de plazas bajó un 57,5%, hasta las 19.142. Un escenario nada halagüeño que no se espera que mejore hasta que la ciencia dé con una solución para el virus.